El arte de ser
Yuli Troya
Coordinadora Local de Estudiantes por la Libertad Ecuador
Artículo publicado originalmente el 26 de febrero del 2016
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Los seres humanos gozamos de una total diversidad en nuestra forma de ser y de expresarnos, en nuestros gustos peculiares por la música, libros, films, deportes; hasta en nuestra orientación sexual, credo o ideología; algo que al final del día no nos define en su totalidad. Diferencias que nos hacen únicos e irrepetibles, diferencias que no deberían afectar nuestra convivencia.Todos debemos vivir nuestra vida y hacer de esta lo que queramos, con total responsabilidad de cada decisión que tomamos, sin que estas afecten directamente a los demás.
¿Por qué hacer remembranza de esto en este mundo tan globalizado? Porque, al parecer, aún no hemos superado la discriminación racial, de credo, orientación sexual y hasta ideológica. Solo basta chequear las noticias internacionales, en las cuales aparecen los numerosos atentados, como el traumático 11 de septiembre de 2001 y como olvidar las noticias mediáticas del 2015 referente a los refugiados de la guerra civil en Siria, el atentado a Charlie Hebdo y los demás atentados en las diferentes localidades de París, todos eventos impactantes ocasionados por el fanatismo de creerse dueños de la verdad y de creer que somos quienes decimos como deben ser o vivir los demás. Porque, al parecer, sin importar el grado nivel académico o cultural que se tenga, aún sobrevive una discriminación catastrófica y realmente infundada.
Por eso, debemos comprender que no somos mejores por predicar alguna religión o no hacerlo, por ser de un estatus social “alto” o “bajo”, por tener tatuajes o no tenerlos, por tener alguna orientación sexual en particular o llevar una filosofía de vida o una ideología determinada. Muy aparte de que somos libres de tener nuestros criterios sobre los demás, debemos ser tolerantes, empáticos, vivir nuestras vidas y dejar vivir al resto.
Somos seres humanos con diversos sueños y aspiraciones, tales como formar una familia, viajar por el mundo, conformar una ONG, ser asesores políticos, ser hippies, fundar empresas, ser voluntarios o simplemente soñadores. En definitiva, el fin que buscamos es ser felices haciendo lo que nos gusta. Somos diversos en muchos aspectos y eso es lo que nos hace virtuosos. Es ahí donde está el arte de ser y de expresarnos sin limitaciones.
El arte de ser es la forma de expresarse y de mostrarnos tal cual somos, sin importar nuestra orientación sexual, credo, ideología o estatus. Los seres humanos somos tan diversos y es ahí donde está la esencia de cada uno de nosotros.
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